domingo, 14 de febrero de 2016

RUTA EN MOTO “SES ALQUERIES”


RUTA EN MOTO “SES ALQUERIES”

Ha sido declarada como Bien de Interes Cultural con categoria de Conjunto Historico, debido a la importacia e interes que aporta su patrimonio constructivo
Esto, las ganas de montar en moto, un nuevo proyecto para la organización de una nueva ruta que me obligaba a localizar un lugar concreto me levanto de nuevo de la cama de madrugada este domingo. Una mañana con viento y amenazando lluvia me dio la bienvenida, intente salir de las carreteras principales para acercarme al objetivo del día, rodando despacio se notan menos las ráfagas de viento, pase por Cas Canar para visitar la Cerveceria Toutatis, una pequeña y acogedora fabrica de cerveza Belga, elaborada en nuestra isla y con la que nos unirá un futuro proyecto. 
El camino de s'Estany Gran y es Campas me llevo hasta casi Biniali y desde allí por la Ma3020 hasta Ses Alqueries.
Al llegar ya te das cuenta de que el pequeño Llogaret intenta mantener su carácter, y que con el paso del tiempo van desapareciendo las muchas casas abandonadas para dejar lugar a casas restauradas con esmero y gusto por nuestra arquitectura , jardines con flores y infinitos detalles que los convierten a cada uno en original, hacen de mi paseo mañanero un rato de lo mas entretenido, disfrutar del silencio reinante y de la paz de lugar, algunas fotos para recordar, que te dejan la sensación de estar robando rincones que no son tuyos y que tanto miman sus propietarios.
Parece ser que el nombre de ses Alqueries, en plural, proviene de las dos alquerías, de raíz islámica, que constituyeron la base de la aldea. Según la documentación del siglo XIII, estas alquerías probablemente son Benibahari —o Benibafari— y Beniporrex.En esta aldea encontramos una gran cantidad de casas remarcables, como las de Cas Teixidor, Can Caló, Can Batlet, Can Cotà, s’Hostal d’en Comuna, Son Paraire, o Can Corna. Así mismo es destacable el molino de Son Pau.
La vuelta a casa como siempre despacio, y disfrutando de la tranquiliad de las carreteras a estas horas de la mañana, me llevo de nuevo junto a los mios sin nigun tropiezo. “Hay que disfrutar de San Valentinnnnnnnn”
Pon tu moto en marcha y disfruta de este bonito rincon de nuestra isla.

Rafa Molta Moto.



domingo, 7 de febrero de 2016

VIAJES AL PARQUE NATURAL DE LAS CEVENNES "PUBLICADO EN SOLO MOTO 30" FEBRERO 2016


VIAJE EN MOTO “DESTINO LAS CEVENNES”

Cuando Carlos mi socio y amigo de IMM me comento que había algunos clientes interesados en un viaje para Octubre, y que estaban abiertos a cualquier destino de unos 5 dias, mi cabeza se fue directamente a una vieja guía que tenia mi padre sobre Francia en casa, y en la cual salían unas fotos preciosas de una zona de dicho país en otoño, así que rápidamente me dirigí a mis viejos cajones donde suelo guardar montones de guías en busca de aquella vieja publicación, de nuevo la nostalgia vino a mi mente , recordando a mi padre recomendándome lugares que recorrer en ese pais el cual visito muchísimas veces al tener parte de su familia emigrados en el, encontré la pagina que buscaba, el lugar era un Parque Nacional, según la guía el único parque nacional habitado de Europa, Fue creado en 1970 como Parque nacional de Cevenas (en francés, Cévennes) y ocupa 85 000 hectáreas (850 km²).

Las Cevenas, están declaradas reserva de la biosfera desde 1985 y forman parte del patrimonio mundial de la Unesco desde el 28 de junio de 2011, como "Paisaje agrícola-pastoral de los Causses y las Cevenas" (Causses y Cevenas).

Naturaleza, pequeñas carreteras, paisajes preciosos, y cerca de nuestro país, un destino perfecto, así que manos a la obra y me puse a preparar la ruta, tarea fácil con toda la información que obtenemos hoy en día de nuestra cajita lista que tenemos todos en casa, los temas de billetes, hoteles, etc, se los deje a Carlos, que como siempre para el día de salida lo tenia todo perfectamente preparado, billetes para el ferry, nuestra hipoteca de cada viaje para los isleños, un hotel en Carcassona para el primer día y los tres días de hotel restantes en la localidad de Le Vigan, en pleno parque Nacional.

El primer día de mediados de octubre, llegamos con el Ferry a Barcelona sobre las 9,30h, con un poco de retraso según la hora prevista, de nuevo decidí salir de Barcelona por la Ronda Litora, me cuesta pagar algun peaje por pequeño que sea, fijamos nuestro objetivo en nuestro primer destino, la Sierra de Montseny. Que diferente a la sierra que yo recordaba con una pequeña carretera en no muy buen estado, casi sin trafico, con la vegetación cubriendo completamente la carretera, el tiempo pasa y sigue con su encanto pero la cantidad de trafico y nuevas edificaciones , le han restado belleza, paramos para tomar un café en un local encantador y muy recomendable, Els Angelets de Sobrevia, situado en la Carretera Seva, 2, 08554 Sant Miquel de Balenyà, el local tiene ambiente de vieja bodega en la cual no pararías de sacarle fotos a cada rincón y cada detalle.

Nuestra ruta transcurrió hacia la Collada de Toses, puerto de montaña que elegimos muchísimos aficionados a las motos para atravesar el pirineo hacia Francia, como siempre un placer el disfrutar sus curvas. Parada para Almorzar en PuigCerda, y de nuevo en ruta para enlazar con la D118 que nos llevaria hasta Carcassona, nuestro destino de este día, no sin antes atravesar el Puerto de Quillane, Gargantas de St-Georges, Quillan yLimoux, preciosos bosques de castaños, miles de hojas cubriendo la calzada, paredes cubiertas de musgos, fue el aperitivo de lo que nos esperaba el resto del viaje. Visita de Carcassona , sus murallas y su precioso casco viejo, cena en la emblemática plaza Marcou donde pudimos degustar la Cassoulet un guiso hecho con alubias blancas o frijoles, y distintas partes de carne animal. Es típico de la cocina del sur de Francia, concretamente de las regiones de Languedoc y Mediodía-Pirineos.

Nuestro segundo día empezó de madrugada,la ilusión por dar un paseo matinal por Carcassone nos levanto de la cama a la mayoría del grupo, las calles desiertas de la Ciutadela, sus locales todavía cerrados te acercaban aun mas al ambiente que debía respirar aquella vieja ciudad en su pasado medieval, fotos y mas fotos de sus rincones y de nuevo al hotel para prepararnos y ponernos en marcha para la ruta del día.

El Otoño nos envolvió con su manto, el ruido de nuestras ruedas al aplastar cientos de castañas y la humedad de la calzada nos hacia estar atentos, pero al mismo tiempo anonadados de tanta belleza, la primera parte la mañana rodamos por la D620 y la D907 hasta la localidad de La Caune, donde paramos a comprar nuestro menú para el almuerzo, variedad de quesos, una buena botella de vino local, que juntamente con la sobrasada , el pan palles que transportábamos desde nuestra isla, y un lugar encantador , hicieron de la parada para el almuerzo un autentico sueño.

Proseguimos nuestra ruta hasta la localidad de Millau para admirar el magnifico y monumental viaducto, una obra faraonica de nuestro siglo.Récord mundial de altura, que culmina a 343 metros (más alto que la Torre Eiffel),  y con una longitud de 2.460 metros, el viaducto se apoya el valle del Tarn en apenas nueve puntos.

Concebido por el ingeniero francés Michel Virlogeux y diseñado por el arquitecto inglés Lord Norman Foster, se integra perfectamente en un paisaje natural, grandioso y preservado : Un tablero metálico muy fino y ligeramente curvo, sujetado con obenques y apoyado sobre 7 pilares muy estilizados, le da aires de velero.

Parada para algunas fotografías desde abajo y de nuevo en marcha para conseguir atravesar el viaducto por su calzada, cosa que no fue fácil y nos llevo algo de tiempo, tuvimos que bajar unos km por la D809 hasta alcanzar la salida 47 para poder entrar en la autovía, pero valió la pena, el pisar su calzada es una experiencia que hay que vivir.

Desde allí y al hacerse un poco tarde, debido al retraso ocasionado decidimos recortar un poco la ruta prevista y escoger la mas rápida para llegar hasta la localidad de Le Vigan, donde teníamos nuestro hotel para los próximos tres días, fácil encontrarlo esta en la carretera que atraviesa la localidad, “Logis Hotel le Mas de la Prairie”, el nombre no es para recordarlo, y el hotel en su interior tampoco tiene mucho que recordar, pero la familia que lo regenta, y su cariñosa y magnifica atención si merecen un buen recuerdo.

Cena en el hotel y a soñar con los días que nos quedan.

El tercer día amaneció nublado y amenazaba lluvia, pero de nuevo la suerte estuvo con nosotros y solo tuvimos unas pocas gotas durante toda la jornada.

Subimos por la D986-D18 y D996 hasta Florac, localidad en la cual paramos para tomar un café y hacer la compra para el almuerzo, algunos patés, uno de ellos de cordero que nos sorprendió por su magnifico sabor, pan y como no una tarta de manzana, en esa zona las manzanas son abundantes y los dulces elaborados con ellas son riquísimos.

De nuevo en ruta, y empieza lo bueno,las “Gorges du Tarn “, km y mas kilómetros de sinuosa carretera entre gargantas,allí te das cuenta de lo pequeños que somos ante la naturaleza, con el rio escoltándonos continuamente y en algunos tramos con unas vistas que te hacen “temblar” sobre la moto .Cruzamos algunos pueblos como las vides, la Malene y San Enimie, pequeño pueblo medieval, en pleno corazón de las gargantas.
es toda una delicia pasear por sus calles empedradas, nos hacen retroceder en el tiempo hasta la edad Media. Debe su nombre a Enimie, hermana del rey Dagobert, la belleza que contemplamos desde las alturas de la carretera nos hizo decidirnos por parar y almorzar en el, el menú decidido y el lugar junto al rio fue de lo mas acertado.

De nuevo nos pusimos en ruta, con una pequeña parada para un café en el Pas de Soucy, unos enormes bloques rocosos se pueden contemplar en el interior del rio desde el pequeño merendero donde sirven un magnifico zumo de naranja y se pueden conseguir cientos de pequeños recuerdos del lugar, el resto de la ruta prosigue entre magnificas gargantas y enormes paredes pedreas, en algunos tramos la carretera es tan estrecha que un coche y una moto no pueden pasar.

Alcanzamos las Terrasses de Truel y las gargantas de la Jonte,para bajar de nuevo por la D48 hasta Le Vigan no sin antes atravesar el pequeño puerto de Minier y sus 1264m.

Cena en el hotel , después de visitar la localidad nos dimos cuenta de que no hay mucha mas oferta complementaria, eso si como cada noche nuestro matrimonio de anfitriones nos trataron de maravilla.





Nuestro cuarto día amaneció esplendido,ni una sola nube en el horizonte, un cielo despejado y de un azul intenso, lo que provoco que la temperatura la noche antes bajase hasta el extremo de dejar todos los asientos de las motos completamente congelados.

Después de un suculento desayuno nos pusimos en ruta sobre las 9h, al rato me di cuenta de que mi Gps no había grabado la ruta prevista del día, había que improvisar rápidamente, mapa sobre el deposito y en marcha.

Erróneamente salí de le Vigan por la D986, lo cual no tenia previsto, al darme cuenta ya había subido unos 12km hacia las montañas, así que decidí atravesar el pequeño puerto de La Triballe, esta pequeña carretera nos permitiria enlazar de nuevo con la ruta prevista, proseguimos hacia St. Jean de Gard, para luego desviarnos por la D9 la cual transcurre en plena cornisa de las Cevennes hasta llegar a Florac, atravesamos de nuevo preciosos bosques , grandes montones de troncos de cedros centenarios talados y preparados para su transporte nos hacen parar a su lado para sacarnos algunas fotografías. La gestión integrada de esta tala de fresnos en los Cévennes, aporta a los cultivadores muchas ventajas,si bien los conocimientos locales y tradicionales sobre la gestión del medio ambiente natural no son todavía suficientemente considerados como conocimientos beneficiosos, aunque en esta comarca si parece que merecen sus habitantes una mención de honor en cuanto al cuidado de sus bosques.

De nuevo paramos en la localidad de Florac, esta vez con la intención de visitarla y aprovechar para almorzar. Costo encontrar aparcamiento para las motos, su parte vieja, compuesta por pequeñas calles empinadas y recovecas nos llevo hasta su Vieja Escuela donde conseguimos buscar algunos huecos justo delante de la entrada.

Florac, del latín "Flor Acquae" (Fleur des Eaux) es un pequeño pueblo de unos 2.000 habitantes en invierno y tres veces mas en verano, se encuentra en la confluencia de cuatro ríos, por eso Florac se dice que es "cruce de caminos de piedra y agua.".

Disfrutamos de un magnifico menú en un pequeño y acogedor Restaurante, de nuevo la cocina local nos sorprendió gratamente, paseamos tranquilamente y sin prisas por la localidad, su castillo es actualmente la sede de la dirección del Parque Nacional de Cévennes y un museo que da toda la información sobre el Parque, pequeños parques y rincones aumentan su belleza aprovechado los magníficos caudales de agua que recibe la población y formando pequeños lagos y canales.

La vuelta con la ruta totalmente improvisada nos llevo hacia LaSalle y desde allí, Sumene y le Vigan, siempre por paisajes que nunca olvidaremos, con pequeñas casas de madera y piedra a los lados del camino, decoradas con un gusto exquisito, y cuidadas con un esmero fuera de lo normal..

Al llegar a Le Vigan, algunos de nosotros,los mas hambrientos de moto, decidimos hacer una pequeña excursión hasta un magnifico monumento natural, el circo de Navacelles es una curiosidad geológica situada al norte de Montpellier, ya en el departamento del Gard. El río Vis excava desde el relieve hace más de 3 millones de años. Hoy la garganta excavada, es un gran desfiladero con 300 metros de profundidad que separa la meseta de Larzac con la de Blandas.

La vista desde ambos márgenes es espectacular. Hay varias posibilidades para disfrutar del panorama. En la vertiente sur un gran restaurante/boutique de souvenirs ofrece una visión increíble, nosotros lo visitamos, pero estaba totalmente cerrado. Del otro lado, terminada la serpenteante carretera, la vista es igualmente apoteósica. El paisaje de las dos mesetas es rudo e inhóspito, castigado por el viento y la fuerza de los elementos. Las laderas del precipicio son pedregales y las carreteras que descienden al cauce del río son muy empinadas, bajamos hasta la pequeña población de Navacelles, para llegar hasta ella tienes que cruzar un curioso puente sumergible, un sistema de construcción muy indicado para estas zonas de fácil inundación, un paseo por sus callejuelas te transporta a épocas pasadas, las vistas del circo desde abajo también son preciosas, dejamos que la noche nos abrazara y despacio y sin prisa rodamos de nuevo hasta nuestro confortable hotel.



Nuestro quinto y ultimo dia. Despedida de nuestros anfitriones y propietarios del hotel, los cuales no pararon de gravar y sacarnos fotos todo el tiempo que anduvimos de arriba abajo preparando nuestro equipaje. Nunca me han gustado las despedidas,prefiero un hasta la próxima,así que con la promesa de volver de nuevo a visitarlos nos pusimos en ruta para disfrutar de nuestro ultimo día de viaje.

Teníamos previsto bajar para almorzar en el magnifico restaurante Les Grands Buffets en Narbona, que abrió sus puertas en el año 1989 y desde entonces se ha convertido en uno de los clásicos del sur de Francia. Aunque el restaurante está ubicado a las afueras de la ciudad y en un entorno poco atractivo, conocer Les Grands Buffets es una experiencia que merece la pena ya que es una auténtica fiesta gastronómica de la alta cocina tradicional que recupera las recetas clásicas de la burguesía francesa. Alli encontramos ostras, la langosta o el bogavante a la americana, el foie gras, el confit de pato o la amplia variedad de quesos de la que su propietario, Louis Privat, se siente más que orgulloso, sobre todo porque el restaurante cuenta con la mayor selección de quesos de Francia, todo ello a un precio relativamente economico.

La ruta estaba estudiada para ser bonita y llegar a la hora prevista, pero a la altura de Lodeve, nos encontramos con la carretera cortada por desprendimientos, las lluvias de hacia unos dias habian provocado muchos problemas en esa zona, asi que recortamos hacia Clermont l'Herault, Bedarieux, atravesamos las espectaculares gargantas de l'Orb y rodeados de viñedos teñidos de otoño llegamos hasta nuestro venerado local.

Como no podía ser de otra manera, se alargo la comida y la sobremesa, así que nuestro ultimo tramo hasta Barcelona fue sin complicaciones, eso si rodnado el minimo por autovia, bajamos por la D611, y D612 escoltados por arboles centenarios a ambos lados de la carretera, en España se talaron la mayoria de ellos al considerarse peligroso para el trafico, ahora mismo es un lujo poder viajar bajo tal manto de historia.

Nuestra entrada en España como siempre por la NII atravesando la Junquera por su viejo paso, parada para algunas compras de ultima hora, y autovía sin pausa hasta nuestro ultimo destino, El Ferry hacia Mallorca.

Quiero dar las gracias a todos los participantes de este viaje, Toni “mi primo” por aguantar mis soplidos por las noches, aTomeu “El Cabra” y a su mujer por su infinita paciencia, a Juan Ramon, por ser tan valiente en su primer viaje en moto, a Toni Grimalt y Toni Gelabert, dos magnificos viajeros, a Martin, nuestro experto en gastronomia y asesor de locales donde comer, que haríamos sin el, y como no a nuestro queridisimo Javier que con sus sesenta y muchos años sigue dando ejemplo de como afrontar este tipo de viajes, con la misma ilusion que cualquier jovenzuelo, a Xisco de Portol y su buen humor, y al Sr Gildesola, el motero mas rapido del Oeste, lastima que encuentre un poco cara la gasolina de Francia y ser pille algún que otro mosqueo. Un abrazo muy fuerte a todos y nos vemos en la próxima.


































VIAJE EN MOTO “DESTINO LAS CEVENNES”

Cuando Carlos mi socio y amigo de IMM me comento que había algunos clientes interesados en un viaje para Octubre, y que estaban abiertos a cualquier destino de unos 5 dias, mi cabeza se fue directamente a una vieja guía que tenia mi padre sobre Francia en casa, y en la cual salían unas fotos preciosas de una zona de dicho país en otoño, así que rápidamente me dirigí a mis viejos cajones donde suelo guardar montones de guías en busca de aquella vieja publicación, de nuevo la nostalgia vino a mi mente , recordando a mi padre recomendándome lugares que recorrer en ese pais el cual visito muchísimas veces al tener parte de su familia emigrados en el, encontré la pagina que buscaba, el lugar era un Parque Nacional, según la guía el único parque nacional habitado de Europa, Fue creado en 1970 como Parque nacional de Cevenas (en francés, Cévennes) y ocupa 85 000 hectáreas (850 km²).

Las Cevenas, están declaradas reserva de la biosfera desde 1985 y forman parte del patrimonio mundial de la Unesco desde el 28 de junio de 2011, como "Paisaje agrícola-pastoral de los Causses y las Cevenas" (Causses y Cevenas).

Naturaleza, pequeñas carreteras, paisajes preciosos, y cerca de nuestro país, un destino perfecto, así que manos a la obra y me puse a preparar la ruta, tarea fácil con toda la información que obtenemos hoy en día de nuestra cajita lista que tenemos todos en casa, los temas de billetes, hoteles, etc, se los deje a Carlos, que como siempre para el día de salida lo tenia todo perfectamente preparado, billetes para el ferry, nuestra hipoteca de cada viaje para los isleños, un hotel en Carcassona para el primer día y los tres días de hotel restantes en la localidad de Le Vigan, en pleno parque Nacional.

El primer día de mediados de octubre, llegamos con el Ferry a Barcelona sobre las 9,30h, con un poco de retraso según la hora prevista, de nuevo decidí salir de Barcelona por la Ronda Litora, me cuesta pagar algun peaje por pequeño que sea, fijamos nuestro objetivo en nuestro primer destino, la Sierra de Montseny. Que diferente a la sierra que yo recordaba con una pequeña carretera en no muy buen estado, casi sin trafico, con la vegetación cubriendo completamente la carretera, el tiempo pasa y sigue con su encanto pero la cantidad de trafico y nuevas edificaciones , le han restado belleza, paramos para tomar un café en un local encantador y muy recomendable, Els Angelets de Sobrevia, situado en la Carretera Seva, 2, 08554 Sant Miquel de Balenyà, el local tiene ambiente de vieja bodega en la cual no pararías de sacarle fotos a cada rincón y cada detalle.

Nuestra ruta transcurrió hacia la Collada de Toses, puerto de montaña que elegimos muchísimos aficionados a las motos para atravesar el pirineo hacia Francia, como siempre un placer el disfrutar sus curvas. Parada para Almorzar en PuigCerda, y de nuevo en ruta para enlazar con la D118 que nos llevaria hasta Carcassona, nuestro destino de este día, no sin antes atravesar el Puerto de Quillane, Gargantas de St-Georges, Quillan yLimoux, preciosos bosques de castaños, miles de hojas cubriendo la calzada, paredes cubiertas de musgos, fue el aperitivo de lo que nos esperaba el resto del viaje. Visita de Carcassona , sus murallas y su precioso casco viejo, cena en la emblemática plaza Marcou donde pudimos degustar la Cassoulet un guiso hecho con alubias blancas o frijoles, y distintas partes de carne animal. Es típico de la cocina del sur de Francia, concretamente de las regiones de Languedoc y Mediodía-Pirineos.

Nuestro segundo día empezó de madrugada,la ilusión por dar un paseo matinal por Carcassone nos levanto de la cama a la mayoría del grupo, las calles desiertas de la Ciutadela, sus locales todavía cerrados te acercaban aun mas al ambiente que debía respirar aquella vieja ciudad en su pasado medieval, fotos y mas fotos de sus rincones y de nuevo al hotel para prepararnos y ponernos en marcha para la ruta del día.

El Otoño nos envolvió con su manto, el ruido de nuestras ruedas al aplastar cientos de castañas y la humedad de la calzada nos hacia estar atentos, pero al mismo tiempo anonadados de tanta belleza, la primera parte la mañana rodamos por la D620 y la D907 hasta la localidad de La Caune, donde paramos a comprar nuestro menú para el almuerzo, variedad de quesos, una buena botella de vino local, que juntamente con la sobrasada , el pan palles que transportábamos desde nuestra isla, y un lugar encantador , hicieron de la parada para el almuerzo un autentico sueño.

Proseguimos nuestra ruta hasta la localidad de Millau para admirar el magnifico y monumental viaducto, una obra faraonica de nuestro siglo.Récord mundial de altura, que culmina a 343 metros (más alto que la Torre Eiffel),  y con una longitud de 2.460 metros, el viaducto se apoya el valle del Tarn en apenas nueve puntos.

Concebido por el ingeniero francés Michel Virlogeux y diseñado por el arquitecto inglés Lord Norman Foster, se integra perfectamente en un paisaje natural, grandioso y preservado : Un tablero metálico muy fino y ligeramente curvo, sujetado con obenques y apoyado sobre 7 pilares muy estilizados, le da aires de velero.

Parada para algunas fotografías desde abajo y de nuevo en marcha para conseguir atravesar el viaducto por su calzada, cosa que no fue fácil y nos llevo algo de tiempo, tuvimos que bajar unos km por la D809 hasta alcanzar la salida 47 para poder entrar en la autovía, pero valió la pena, el pisar su calzada es una experiencia que hay que vivir.

Desde allí y al hacerse un poco tarde, debido al retraso ocasionado decidimos recortar un poco la ruta prevista y escoger la mas rápida para llegar hasta la localidad de Le Vigan, donde teníamos nuestro hotel para los próximos tres días, fácil encontrarlo esta en la carretera que atraviesa la localidad, “Logis Hotel le Mas de la Prairie”, el nombre no es para recordarlo, y el hotel en su interior tampoco tiene mucho que recordar, pero la familia que lo regenta, y su cariñosa y magnifica atención si merecen un buen recuerdo.

Cena en el hotel y a soñar con los días que nos quedan.

El tercer día amaneció nublado y amenazaba lluvia, pero de nuevo la suerte estuvo con nosotros y solo tuvimos unas pocas gotas durante toda la jornada.

Subimos por la D986-D18 y D996 hasta Florac, localidad en la cual paramos para tomar un café y hacer la compra para el almuerzo, algunos patés, uno de ellos de cordero que nos sorprendió por su magnifico sabor, pan y como no una tarta de manzana, en esa zona las manzanas son abundantes y los dulces elaborados con ellas son riquísimos.

De nuevo en ruta, y empieza lo bueno,las “Gorges du Tarn “, km y mas kilómetros de sinuosa carretera entre gargantas,allí te das cuenta de lo pequeños que somos ante la naturaleza, con el rio escoltándonos continuamente y en algunos tramos con unas vistas que te hacen “temblar” sobre la moto .Cruzamos algunos pueblos como las vides, la Malene y San Enimie, pequeño pueblo medieval, en pleno corazón de las gargantas.
es toda una delicia pasear por sus calles empedradas, nos hacen retroceder en el tiempo hasta la edad Media. Debe su nombre a Enimie, hermana del rey Dagobert, la belleza que contemplamos desde las alturas de la carretera nos hizo decidirnos por parar y almorzar en el, el menú decidido y el lugar junto al rio fue de lo mas acertado.

De nuevo nos pusimos en ruta, con una pequeña parada para un café en el Pas de Soucy, unos enormes bloques rocosos se pueden contemplar en el interior del rio desde el pequeño merendero donde sirven un magnifico zumo de naranja y se pueden conseguir cientos de pequeños recuerdos del lugar, el resto de la ruta prosigue entre magnificas gargantas y enormes paredes pedreas, en algunos tramos la carretera es tan estrecha que un coche y una moto no pueden pasar.

Alcanzamos las Terrasses de Truel y las gargantas de la Jonte,para bajar de nuevo por la D48 hasta Le Vigan no sin antes atravesar el pequeño puerto de Minier y sus 1264m.

Cena en el hotel , después de visitar la localidad nos dimos cuenta de que no hay mucha mas oferta complementaria, eso si como cada noche nuestro matrimonio de anfitriones nos trataron de maravilla.





Nuestro cuarto día amaneció esplendido,ni una sola nube en el horizonte, un cielo despejado y de un azul intenso, lo que provoco que la temperatura la noche antes bajase hasta el extremo de dejar todos los asientos de las motos completamente congelados.

Después de un suculento desayuno nos pusimos en ruta sobre las 9h, al rato me di cuenta de que mi Gps no había grabado la ruta prevista del día, había que improvisar rápidamente, mapa sobre el deposito y en marcha.

Erróneamente salí de le Vigan por la D986, lo cual no tenia previsto, al darme cuenta ya había subido unos 12km hacia las montañas, así que decidí atravesar el pequeño puerto de La Triballe, esta pequeña carretera nos permitiria enlazar de nuevo con la ruta prevista, proseguimos hacia St. Jean de Gard, para luego desviarnos por la D9 la cual transcurre en plena cornisa de las Cevennes hasta llegar a Florac, atravesamos de nuevo preciosos bosques , grandes montones de troncos de cedros centenarios talados y preparados para su transporte nos hacen parar a su lado para sacarnos algunas fotografías. La gestión integrada de esta tala de fresnos en los Cévennes, aporta a los cultivadores muchas ventajas,si bien los conocimientos locales y tradicionales sobre la gestión del medio ambiente natural no son todavía suficientemente considerados como conocimientos beneficiosos, aunque en esta comarca si parece que merecen sus habitantes una mención de honor en cuanto al cuidado de sus bosques.

De nuevo paramos en la localidad de Florac, esta vez con la intención de visitarla y aprovechar para almorzar. Costo encontrar aparcamiento para las motos, su parte vieja, compuesta por pequeñas calles empinadas y recovecas nos llevo hasta su Vieja Escuela donde conseguimos buscar algunos huecos justo delante de la entrada.

Florac, del latín "Flor Acquae" (Fleur des Eaux) es un pequeño pueblo de unos 2.000 habitantes en invierno y tres veces mas en verano, se encuentra en la confluencia de cuatro ríos, por eso Florac se dice que es "cruce de caminos de piedra y agua.".

Disfrutamos de un magnifico menú en un pequeño y acogedor Restaurante, de nuevo la cocina local nos sorprendió gratamente, paseamos tranquilamente y sin prisas por la localidad, su castillo es actualmente la sede de la dirección del Parque Nacional de Cévennes y un museo que da toda la información sobre el Parque, pequeños parques y rincones aumentan su belleza aprovechado los magníficos caudales de agua que recibe la población y formando pequeños lagos y canales.

La vuelta con la ruta totalmente improvisada nos llevo hacia LaSalle y desde allí, Sumene y le Vigan, siempre por paisajes que nunca olvidaremos, con pequeñas casas de madera y piedra a los lados del camino, decoradas con un gusto exquisito, y cuidadas con un esmero fuera de lo normal..

Al llegar a Le Vigan, algunos de nosotros,los mas hambrientos de moto, decidimos hacer una pequeña excursión hasta un magnifico monumento natural, el circo de Navacelles es una curiosidad geológica situada al norte de Montpellier, ya en el departamento del Gard. El río Vis excava desde el relieve hace más de 3 millones de años. Hoy la garganta excavada, es un gran desfiladero con 300 metros de profundidad que separa la meseta de Larzac con la de Blandas.

La vista desde ambos márgenes es espectacular. Hay varias posibilidades para disfrutar del panorama. En la vertiente sur un gran restaurante/boutique de souvenirs ofrece una visión increíble, nosotros lo visitamos, pero estaba totalmente cerrado. Del otro lado, terminada la serpenteante carretera, la vista es igualmente apoteósica. El paisaje de las dos mesetas es rudo e inhóspito, castigado por el viento y la fuerza de los elementos. Las laderas del precipicio son pedregales y las carreteras que descienden al cauce del río son muy empinadas, bajamos hasta la pequeña población de Navacelles, para llegar hasta ella tienes que cruzar un curioso puente sumergible, un sistema de construcción muy indicado para estas zonas de fácil inundación, un paseo por sus callejuelas te transporta a épocas pasadas, las vistas del circo desde abajo también son preciosas, dejamos que la noche nos abrazara y despacio y sin prisa rodamos de nuevo hasta nuestro confortable hotel.



Nuestro quinto y ultimo dia. Despedida de nuestros anfitriones y propietarios del hotel, los cuales no pararon de gravar y sacarnos fotos todo el tiempo que anduvimos de arriba abajo preparando nuestro equipaje. Nunca me han gustado las despedidas,prefiero un hasta la próxima,así que con la promesa de volver de nuevo a visitarlos nos pusimos en ruta para disfrutar de nuestro ultimo día de viaje.

Teníamos previsto bajar para almorzar en el magnifico restaurante Les Grands Buffets en Narbona, que abrió sus puertas en el año 1989 y desde entonces se ha convertido en uno de los clásicos del sur de Francia. Aunque el restaurante está ubicado a las afueras de la ciudad y en un entorno poco atractivo, conocer Les Grands Buffets es una experiencia que merece la pena ya que es una auténtica fiesta gastronómica de la alta cocina tradicional que recupera las recetas clásicas de la burguesía francesa. Alli encontramos ostras, la langosta o el bogavante a la americana, el foie gras, el confit de pato o la amplia variedad de quesos de la que su propietario, Louis Privat, se siente más que orgulloso, sobre todo porque el restaurante cuenta con la mayor selección de quesos de Francia, todo ello a un precio relativamente economico.

La ruta estaba estudiada para ser bonita y llegar a la hora prevista, pero a la altura de Lodeve, nos encontramos con la carretera cortada por desprendimientos, las lluvias de hacia unos dias habian provocado muchos problemas en esa zona, asi que recortamos hacia Clermont l'Herault, Bedarieux, atravesamos las espectaculares gargantas de l'Orb y rodeados de viñedos teñidos de otoño llegamos hasta nuestro venerado local.

Como no podía ser de otra manera, se alargo la comida y la sobremesa, así que nuestro ultimo tramo hasta Barcelona fue sin complicaciones, eso si rodnado el minimo por autovia, bajamos por la D611, y D612 escoltados por arboles centenarios a ambos lados de la carretera, en España se talaron la mayoria de ellos al considerarse peligroso para el trafico, ahora mismo es un lujo poder viajar bajo tal manto de historia.

Nuestra entrada en España como siempre por la NII atravesando la Junquera por su viejo paso, parada para algunas compras de ultima hora, y autovía sin pausa hasta nuestro ultimo destino, El Ferry hacia Mallorca.

Quiero dar las gracias a todos los participantes de este viaje, Toni “mi primo” por aguantar mis soplidos por las noches, aTomeu “El Cabra” y a su mujer por su infinita paciencia, a Juan Ramon, por ser tan valiente en su primer viaje en moto, a Toni Grimalt y Toni Gelabert, dos magnificos viajeros, a Martin, nuestro experto en gastronomia y asesor de locales donde comer, que haríamos sin el, y como no a nuestro queridisimo Javier que con sus sesenta y muchos años sigue dando ejemplo de como afrontar este tipo de viajes, con la misma ilusion que cualquier jovenzuelo, a Xisco de Portol y su buen humor, y al Sr Gildesola, el motero mas rapido del Oeste, lastima que encuentre un poco cara la gasolina de Francia y ser pille algún que otro mosqueo. Un abrazo muy fuerte a todos y nos vemos en la próxima.